Sombras y luz
Retratos
Persecución
Escaparates como protagonista
Fotos a las que no le echaría foto
Desenfocadas
Patrimonio
Mobiliario urbano
En esta salida de campo me salí mucho de mi zona confort en cuanto a la fotografía y me di cuenta que hay más opciones a parte de la fotografía a color con el encuadre predeterminado del teléfono. Aprendí a observar mejor mi entorno, a fijarme en detalles que de diario no me fijo y a darme cuenta de los pequeños detalles que hay en la ciudad, por ejemplo una pegatina en una farola, un palé en una plaza o una fregona en un balcón. También, dejé de preocuparme tanto por la nitidez o movimiento de la fotografía, aprendí que una buena foto también se puede ver borrosa, no tiene que estar “perfecta”.
Esto al relacionarlo con la educación llego a la conclusión que la fotografía puede desarrollar habilidades de observación y reflexión. Además, este proceso me ha demostrado que se aprende mucho más a través de experiencias prácticas, como esta salida de campo, que simplemente estando en el aula viendo las fotos que podríamos haber realizado.