Intervenir fotografías familiares antiguas es una forma creativa de conectar con el pasado y darle un nuevo significado. ​Este proceso es muy personal y emocional. Podemos reflexionar sobre nuestra relación con nuestras raíces, con los recuerdos del pasado y con lo que esas imágenes significan para nosotros. Es una manera de tomar esos recuerdos y hacerlos propias, actualizándolos y manteniéndolos relevantes.

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Además, intervenir fotografías es una forma de preservar el recuerdo, pero no como algo fijo, sino como algo que evoluciona. De esta manera, las fotos familiares se convierten en un puente entre generaciones, recordándonos que la memoria no es algo estático, sino algo que se transforma con el tiempo.